Se veía venir

Hola amigos viajeros

Como dice el refrán, tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. Si ayer os contaba lo achacoso que ando últimamente, hoy os tengo que contar que he tenido que irme al fisio.

Esta mañana, cuando hemos llevado a María con sus abuelos, he tenido un primer amago de ciática que se ha quedado ahí, como agazapado, esperando el momento de atacarme por sorpresa. Me he ido a trabajar pero de camino al curro, desde la estación hasta el edificio donde trabajo que habrá la friolera de 5 minutos andando, he visto como me adelantaba un caracol y he pensado: "Carlos, estás como ese, para el arrastre".

Según ha ido avanzando la mañana me he ido encontrando peor, no encontraba postura en la silla y al final, a eso de las 11 le he dicho a mi jefa que, a pesar de que sé que soy del todo punto imprescindible, me iba a casa porque me estaba hasta mareando un poco. He estado todo el día tirado en el sofá y por poco pierdo mi cita con el fisio, porque me he quedado dormido y me he despertado para irme con el tiempo justo.

Hoy no estaba Nuria, la fisio que me ha tratado las últimas veces y que, a pesar de las palizas que me mete, me deja como nuevo, como un coche de km 0 de esos. Me ha tratado Sandra, que así, de buenas a primeras y tras contarle lo que me pasaba, ha ido directa al grano y me ha dicho que me quedara en calzoncillos... Hombre, uno es un poco tradicional, está casado, tiene una hija, está esperando otro y así, en la primera cita, que una chica le diga que se quede en calzoncillos... pues como que me he quedado paradillo. Y si encima hubierais visto la foto que tenía y que ponía que era un masaje thai... Más que thai parecía aaaaaaaay, porque la posturita era para verla. La verdad es que me ha tratado muy bien y no me ha hecho demasiado daño, pero cuando le he dicho a Elena que me había tocado el culo... tendría que haberle dicho que me había hecho un estiramiento en el glúteo para distenderlo, creo que hubiera quedado más fisioterapéutico.

En fin, como leí ayer a Alex de la Iglesia: "ante el dolor sólo nos queda la carcajada". Espero poder reírme pronto de estos dolores, pero la verdad es que ahora que me estoy enfriando, me alegro de terminar la caminata de hoy porque me vuelve a doler.

Hasta la próxima viajeros