El porqué de algunas cosas

Hola amigos viajeros

Como habréis podido comprobar, esta semana no he salido a andar, porque he tenido una semana agotadora y mi espalda no me lo permitía, menos mal que mi fisio (gracias Nuria) me arregla un poco para seguir tirando.

No pretendo, a pesar del título, dar respuesta al porqué de las cosas, sólo a algunas de ellas y que me atañen directamente. Por ejemplo, mi mujer me preguntó en su momento porqué había hecho un blog y porqué, en principio, no quería darlo a conocer entre la familia y los amigos. A la primera pregunta le contesté que simplemente me apetecía contar cosas y, como ya dije en mi primera etapa, me daba igual si alguien lo leía o no; a la segunda pregunta, la respuesta era fácil: en el fondo soy tímido y quizás, a pesar de ser de ciencias y no ser muy hábil con la palabra, es una forma de hablar de mi.

Algunos os preguntaréis porqué he cambiado el título, pues bien, la respuesta es que buscando por mi título en google, encontré que ya había otras entradas, incluso un blog que se llamaba caminando.blog... y no quería que nadie me dijera que si no tengo imaginación, así que, como además había visto un anuncio de la película El viaje de Chihiro, pensé en cambiarlo y por eso ahora el blog se llama así. Lo siento por los que me teníais un enlace puesto, pero como la dirección es la misma, no pasa nada.

Dentro de unos añitos, mi hija María empezará con la fase que empiezan todos los niños de preguntar, muchas veces por el hecho de preguntar, "y porqué?" Entonces sí que tendremos que responder un montón de preguntas, para las cuales sé que no tendré siempre la respuesta y que, al igual que ahora con sus gestos, sus miradas... me harán ser un poquito más feliz cada día, y como a mi lado tendré a Elena, que es mi mejor amiga, conseguiré ser el doble de feliz cada día.

No sé si la semana que viene saldré a andar mucho, amigos viajeros, porque tengo un curso durante todo el día y sé que voy a llegar muy cansado a casa como para andar siquiera un poquito, pero este viaje me lo tomo con tranquilidad y nunca he sido corredor de sprint, sino más bien de fondo.

Un saludo amigos viajeros