Al mal tiempo...

Hola amigos viajeros

Esta semana y hasta fin de mes, he conseguido una plaza de garaje en mi oficina y estoy disfrutando de los atascos, los conductores con prisas, los conductores sin prisas y, especialmente, de la radio. La verdad es que con la radio me pasa como con la tele: busco que me entretenga, prefiero escuchar música a que me den noticias y así me pasa, que me aficiono a oír un programa y cuando de repente desaparece, me pierdo entre los diales hasta que encuentro otro que me ofrece algo que me guste.

El caso es que desde hace un tiempo oigo Cadena 100, concretamente por las mañanas el programa "Buenos días Javi Nieves". En este programa, todos los días sacan un tema para que los radio oyentes llamen y cuenten sus experiencias respecto a dicho tema, hablan de noticias sorprendentes, estudios curiosos de los que hablaba hace unos días... Entre sus espacios habituales, tienen la medio hora de "Camera Café" (programa del cual soy un gran fan), en la que reproducen uno de los ensayos que hacen en la tele.

Hoy, uno de los personajes se alegraba de que terminase la semana porque había sido muy mala para él, entre otras cosas, porque a punto habían estado de ponerle una multa por aparcar en un sitio de minusválidos (como si no hubiera manadas de cabestros que lo hacen) Frente a este personaje, la secretaria del jefe decía que para ella la semana no había sido mala y eso que había empezado con el incendio de su casa, el embargo del hijo mayor por el banco hasta que pague la hipoteca, el ingreso hospitalario de la hija pequeña por una mordedura de rata en el puente bajo el que estaban viviendo desde el incendio... Vamos, que la mujer decía que había que ver la parte buena de la historia y estaba tan contenta porque, a pesar de estas desgracias, era el primer fin de semana que pasaba en muuuuuuucho tiempo sin niños.

Escuchando la historia, me he acordado de "La vida de Brian", esa gran película de los Monty Python (para mí la única buena de ellos) en la que al final, mientras el protagonista está siendo crucificado, sus compañeros de crucifixión van cantando "Mira siempre el lado brillante de la vida". Me gusta mucho esa filosofía: puedes ir por la vida sacando pegas a todo o disfrutando cada experiencia por que forma parte de tu vida y aprovecharla para sacar algo bueno, aunque sólo sea para aprender y no repetir una mala experiencia.

Pues nada amigos, disfrutad del viaje, y más con este tiempo y ponedle siempre al mal tiempo buena cara, aunque sólo sea para ser, cada día, un poquito más felices.

Hasta la próxima viajeros